A 2 años
Hace 2 años, comencé una nueva etapa laborar en mi carrera. A decir verdad, una de las mejores decisiones que he tomado hasta ahora; unos ex-clientes de la agencia de publicidad para la que trabajaba me invitaron a participar en su nuevo proyecto de empresa. Yo, que en ese momento no estaba feliz en el lugar en el que trabajaba, acepté casi sin pensarlo. Hoy, quiero darle rienda suelta a la nostalgia y a los recuerdos. ¿En qué he mejorado o que ha cambiado en estos 2 años?
Primero, el tema de este blog. Debo admitir que lo que deseaba al principio era un blog profesional para mostrar mis habilidades en el desarrollo de software. Poco a poco, me di cuenta que deseaba escribir de muchos mas temas que de solo código, y como pasé incluso meses sin subir un solo post me dije a mi mismo que simplemente escribiría cualquier cosa. 🙂 Este es mi espacio personal y escribiré lo que se encuentra “en mi universo interior”, son invitados totales a leerlo. Y si les gusta, también son invitados a comentar.
También ha cambiado mi actitud hacia el trabajo, motivado también por mi empresa, asumiendo más protagonismo en los proyectos dada la confianza que mis actuales empleadores han depositado en mí, la cuál espero no defraudar. Mis logros mas importantes en estos 2 años en esta empresa son, por una parte, al fin ver la luz con industoreglobal.com y por otra, sentir que aporté un mínimo granito de arena a las Fiestas del Pitic de este año, por medio de una app para iPhone y Android, y lo digo sinceramente, para mi una de las mejores Fiestas que ha habido, y la abrumadora asistencia a las mismas habla por si sola. Añadiendo al tema de las apps, desarrollarlas me ayudo también a dominar la tecnología de Microsoft para el desarrollo de aplicaciones, la cual deseaba explotar desde hace tiempo.
La historia de como conocí a mis actuales empleadores, Omar y su mano derecha, Daniel, es algo digno de contar. En 2014, yo laboraba en una agencia de publicidad. Omar llegó con un proyecto muy interesante: una aplicación para celular, en una tecnología que yo desconocía totalmente pero dominé rápidamente. La primera reunión de trabajo, Omar nos presentó a Daniel, quién es asesor tecnológico de toda la vida, argentino de nacimiento y sonorense por adopción. Sumado a que Gonzalo, mi empleador, es chileno, ¡Eso parecía la reunión de las Américas :D!. En esa junta me di cuenta de algo: ¡Yo sabía más que Daniel! (sorry Daniel pero ¡Se tenia que decir y se dijo! 🐤). El tiempo pasó, Me reencontré con Omar en un evento al que la empresa donde laboraba anteriormente había asistido. Me invitó a participar en su nuevo proyecto, tras negociar varios meses, ya estoy acá 🙂
Mi relación conmigo mismo es algo que había descuidado en todo este tiempo. Buscaba ser aceptado, quería la aprobación de todos, cuando lo que necesitaba era ser aprobado por mí mismo. Recuerdo cuando en un evento conocimos a un doctor traído desde España. Uno de sus ejercicios fue sentarnos en una silla mientras frente a nosotros colocábamos otra vacía. En la silla vacía imaginamos que nuestro “yo del futuro” estaba sentado ahí. ¿Qué es lo que he visto ahí?. Alguien seguro de sí, que hace lo que le apasiona, que no busca pertenecer, sino ser y así, sin mas, se verá rodeado de personas que gustan de sus mismas aficiones, gustos y que su personalidad les sea agradable. Solo siendo, no pretendiendo ser. ¿Lo he logrado?. En ese camino voy.
Tengo pendiente un post acerca de como Pokémon Go me ha ayudado en ese proceso de aceptarme a mí mismo. Puede sonar ridículo que hable de esa manera de una app para celular, pero mis amigos “pokemoneros” sabrán de inmediato de lo que hablo. 😉 Un youtuber dijo alguna vez que “Pokémon Go es una aplicación de running con una fachada de Pokémon”. Y yo le añadiría “y con interacción social”. Si empiezo a describir los momentos divertidos que he obtenido en este juego y a describir a la cantidad de amigos nuevos que he hecho a través de él, este post se haría inmenso. Ya lo haré en su momento, solo necesito encontrar el tiempo adecuado para hacerlo 🙂
Un punto que para muchos resultará triste, pero para mi es un paso en la dirección correcta es el abandono de mis creencias religiosas. Asumirme como agnóstico es una de las decisiones más difíciles que he tomado. Y no porque “mi fe estuviera en duda”, sino porque “creer en algo” me hacía sentir bien y me mantenía en una zona de confort. Asumir que gran parte de la Biblia no tiene sentido, en contraparte con el “alivio” de sentir la mano de “un ser protector y omnipotente” cuya existencia es imposible probar y que gran parte de “lo que sientes” solo está en tu imaginación… El ojo crítico es demoledor, por eso mismo se te dice que a Dios no se le cuestiona. Misma razón por la que se te dice que “un diamante es para siempre”. Son hermosos, pero su valor intrínseco es nulo; es decir, extraerlos cuesta casi nada, son sumamente abundantes y hasta se pueden producir en laboratorio. Solo porque la gente “imagina” que son valiosos aceptan pagar cantidades exhorbitantes en anillos de diamantes cuando en la realidad el aro de oro que lo sostiene cuesta intrínsecamente cientos de veces mas que la roca. Algo así sentía por mí antigua religión. Sin embargo, acepto que no tengo todas las respuestas, por eso soy agnóstico y no ateo. Solo para dejar abierta la posibilidad de que algo nuevo se descubra en el futuro 🙂
Y bueno, otro logro menor pero me gustaría mencionar es que al fin me concedí adquirir un objeto que desde hace tiempo deseaba, un capricho una herramienta de trabajo absolutamente necesaria en mi día a día. Hablo de mi MacBook. 😉
En definitiva, ¿soy una mejor versión de mí mismo después de 2 años? absolutamente, pero no puedo parar aquí. Aún hay mucho por hacer y muchas metas que cumplir.